Los alquileres se encarecerán un 10% en Barcelona por el auge de las viviendas turísticas
- 19 de SEPTIEMBRE de 2016
El auge las viviendas turísticas en Barcelona va a suponer todo un revulsivo para el precio de los alquileres en la ciudad. Ésta es la previsión que maneja un estudio de Don Piso, en el que estima que el precio medio del arrendamiento se podría encarecer hasta un 10% en los próximos dos años y eso que ya está en máximos históricos según el último informe trimestral de idealista.
“El fenómeno de los pisos turísticos presionará el mercado y de aquí a uno o dos años nos encontraremos con un mercado de alquiler en Barcelona que experimentará un incremento de los precios”, afirma Emiliano Bermúdez, subdirector general de la inmobiliaria.
En su último informe, la firma estima que el coste medio del m2 podría situarse a finales de 2018 alrededor de los 13,5 euros, frente a los 12,17 euros actuales, lo que provocaría un incremento de dos dígitos si finalmente se confirma su previsión.
El escenario se antoja complicado si tenemos en cuenta que la capital catalana es la reina del alquiler. Mientras que en ciudades como Valencia o Madrid las viviendas en régimen de alquiler no superan el 20%, en Barcelona el porcentaje alcanza el 25%. Esto significa que una de cada cuatro viviendas que hay en la urbe está destinada al arrendamiento, lo que le convierte en la ciudad española con mayor cantidad de stock de pisos en alquiler en relación al número total de inmuebles.
En algunos distritos la concentración de alquileres es aún más representativa. En Ciutat Vella, sin ir más lejos, la ocupación de inmuebles con la modalidad arrendadora se dispara hasta el 58%.
La inmobiliaria también recuerda en el informe que en la Ciudad Condal actualmente hay unos 15.900 inmuebles dedicados al alquiler turístico, lo que se traduce en un escaso 8% de todos los pisos que son susceptibles de ser destinados al alquiler vacacional (unos 206.000), y que prácticamente la mitad de las viviendas disponibles no posee licencia para ser explotada con ese fin.
Como consecuencia, el Ayuntamiento dirigido por Ada Colau está llevando a cabo un plan para acabar con los inmuebles turísticos ilegales y ha pedido la colaboración ciudadana para destapar todos los casos posibles. Solo durante el primer mes en el que han estado activas las inspecciones, el consistorio ha logrado destapar 256 pisos turísticos.